Harina de chía, es la mayor fuente vegetal de ácidos grasos omega 3. Aporta vitaminas A y B, minerales, como calcio, hierro, magnesio, zinc, cobre y potasio. Recomendada para aquellas personas con sensibilidad al trigo, con intolerancia al gluten y con diabetes, se usa también para controlar el peso de manera saludable, mejorando la digestión. Es rica en fibra, apta para celiacos.
Ayuda a controlar los niveles de colesterol y la tensión arterial. Facilita la digestión, mejora el tránsito intestinal y tiene efecto saciante. Colabora en el mantenimiento de una buena salud cardiovascular. Reduce los niveles de colesterol. Previene la anemia.
Se coloca 1 entre 2 cucharadas de harina en un vaso de agua, u otra bebida, dejar reposar por unos 15 min hasta formar un gel, disolverlo bien y degustar. Consuma con leche, yogurt, ensaladas, frutas, entre otros. También puede prepararse: Avenas, puddings, brownies, kekes, repostería, pancakes